Aunque la NOM-016 de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), exigía que Petróleos Mexicanos debía de contar con diésel de Ultra Bajo Azufre desde el pasado 1 de enero de 2019, la empresa paraestatal logró evadir la regulación a través de un amparo, con la que suspendió la obligación normativa para la producción e importación de este tipo de combustible más limpio.

La información fue presentada por el Diario Reforma, medio que obtuvo una copia del documento de amparo, y que explicó que mientras la industria de vehículos pesados vivía en incertidumbre y demandaba avances en materia de la disponibilidad de combustible, la paraestatal no estaba incumpliendo ninguna ley, pues su obligación normativa había desaparecido. 

Actualmente, según información del Plan de Negocios de Pemex, será hasta que entre en operación la Refinería Dos Bocas, en Tabasco, que Pemex podrá hacer frente a la demanda requerida por el país de diésel de Ultra Bajo Azufre. 

Miguel Elizalde, presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones, A.C. (ANPACT), aseguró que la información recientemente publicada explica el comportamiento de Pemex, al comercializar diésel regular, cuando por norma ya se requería el 100% de disponibilidad de combustible limpio, y anunció que frente al escenario planteado y las pocas certezas, es que se solicitará de manera urgente una adecuación a los tiempos establecidos en la NOM-044 de SEMARNAT.

“Esto representa un problema para nuestra industria ya que a nosotros nos obligarán a producir únicamente vehículos que no pueden usar el diésel regular como lo establece la NOM-044-SEMARNAT-2017.”

Frente a este escenario, ANPACT solicita a la Secretaría de Energía (SENER), y a su titular Rocío Nahle, que se defina la fecha en la cual se contará con diésel UBA en 100% del territorio nacional, para que de acuerdo con esa fecha; la SEMARNAT ajuste la NOM-044 para prolongar la vigencia de la tecnología actual y que esta conviva con las más avanzadas.