A principios de año el INEGI informó el dato sobre la inflación para el año 2017, que alcanzó un 6.77%, la más alta de los últimos 17 años. Si bien este dato es ya de por si alarmante y además perjudicial para la economía de los mexicanos, cuando analizamos cuáles fueron los precios que mayor impacto tuvieron sobre la inflación de ese periodo, el sector transporte nuevamente resulta muy golpeado, ya que fue el aumento en el precio de los combustibles de principios de 2017 lo que causó dicha inflación histórica.
Además del dato que publica INEGI sobre la inflación basado en el INPC (Índice Nacional de Precios al Consumidor), el cual se compone por una canasta de productos bastante amplia y a la cual se le asigna cierto peso específico en la construcción de dicho índice basado en el consumo de los mexicanos, este instituto también publica el INPP (Índice Nacional de Precios al Productor). Este último, a diferencia del primero, está compuesto por los precios de los insumos a los productores. Aún más específico, el INEGI publica el índice 1461 el cual es el INPP específico del Autotransporte de Carga. Dicho índice, según datos del propio INEGI, presentó un aumento durante el 2017 del 7.60%, todavía más alto que la inflación anunciada.
Ahora bien, estos índices solamente nos dan una idea general del impacto inflacionario en el desempeño de nuestra actividad, puesto que a pesar de ser un índice específico para el Autotransporte de carga, no llega a especificarse por región o zona del país, por modalidad de transporte, por tipo de operación, etc. Cada empresa, cada ruta, cada modalidad y cada variante adicional del transporte tienen su estructura de costos particular y su impacto conforme al aumento de los insumos, por tanto, tienen su propia inflación.
Es muy importante que hacia dentro de nuestras empresas conozcamos el impacto inflacionario de los insumos que utilizamos, puesto que esta es la única forma de poder identificar cuándo y cuánto tenemos que impactar dichos aumentos hacia los usuarios del servicio, sin perder la rentabilidad del negocio, cuidando la competitividad.
Aquí nos permitimos poner un ejemplo de estructura de costos en la ruta Monterrey – Nuevo Laredo en caja seca con 20 tons. de carga y el impacto inflacionario que tuvo cada uno de estos rubros durante el año 2017. Al multiplicar el porcentaje de un insumo en la estructura de costos por el porcentaje de aumento en su costo, encontraremos el impacto real de dicho aumento en nuestro costo total.
Es decir, siguiendo el ejemplo de la tabla mostrada, si los seguros en 2017 representaban el 4% del costo total y las pólizas de seguro tuvieron un aumento del 20%, esto representa que cada uno de nuestros fletes tienen un costo de 0.74% mayor (casi un 1%).
Así mismo, si el combustible, que en nuestro ejemplo es el 23% del costo total sufrió un 13% de incremento, esto significa que por este aumento en particular nuestro costo en el flete es un 2.97% mayor (casi un 3%). Sobra decir que si un insumo no tuvo cambio en su precio, dicho insumo no ocasiona un aumento en nuestro costo total, como es el caso de la llantas en nuestro ejemplo. Así pues, sumando cada uno de los impactos por cada incremento en su respectivo insumo nos arroja nuestro impacto total en el costo de nuestro servicio, es decir nuestra inflación.
En nuestro ejemplo, vemos que el ejercicio nos arroja un 14.01% de incremento en nuestra estructura de costos, muy superior al 6.77% de la inflación general e incluso por encima del 7.60% de la inflación anunciada por INEGI para el Autotransporte de Carga.
Esto no quiere decir que todas las empresas de transporte de carga tengan ese mismo impacto en sus costos, ese fue el impacto de esta empresa en particular y específicamente en la ruta señalada. Cada uno de nosotros tendremos que darnos a la tarea de conocer nuestra estructura de costos, pudiendo usar como ejemplo los rubros señalados en la tabla, sin embargo debemos personalizarla y adecuarla a cada uno de nuestros casos con los datos reales de cada ruta y tipo de servicio que se proporciona.
A continuación presentamos el comportamiento durante el periodo comprendido entre Enero del 2017 a Enero del 2018 de los precios de los principales insumos del transporte de carga:
Aquí no se pretende señalar cuánto se debe aumentar el precio del servicio que brindan los autotransportistas, eso es una decisión que cada empresa en particular deberá tomar y llevar a cabo una negociación con sus clientes. Lo que sí se busca es auxiliar a los transportistas en el entendimiento del impacto de cada uno de nuestros insumos para determinar un impacto global en la estructura de costos total, ya que puede resultar confuso en ocasiones al recibir información de indicadores y precios que no necesariamente representan el impacto real a cada transportista.