El pasado 17 de marzo, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga informó que, siguiendo con atención la información relacionada con el desarrollo del Coronavirus (COVID-19) y atendiendo las indicaciones de las autoridades de Salud, la organización tomó la determinación de tomar medidas de precaución para evitar en lo posible tener alguna situación de riesgo por la propagación del citado virus, y anunció que la Asamblea General Ordinaria, que se tenía programada para realizarse el 26 de marzo, quedó pospuesta para el próximo 10 de junio.
De igual forma, se explicó que bajo estas circunstancias, CANACAR antepone su responsabilidad y cooperación para mantener informados de las recomendaciones y instrucciones de las autoridades a nuestros afiliados transportistas, proveedores, expositores y asistentes en general, a través de sus canales oficiales de información.
Posteriormente, Enrique González Muñoz, presidente del organismo anunció en conferencia de prensa, la presentación del “Programa para Garantizar el Abasto, Enfrentar la Emergencia Sanitaria y Mantener el Empleo”, esto con la intención de evitar el impacto directo al sector y a la cadena logística, ya que el autotransporte es un aliado en momentos de crisis, y cumple una función social al garantizar el abasto de medicinas, alimentos y combustible.
La CANACAR dejó clara su preocupación ante la emergencia y explicó que las empresas del sector deben reforzar las acciones de prevención pues los operadores y operativos de las empresas son personas expuestas al contagio.
La propuesta de proyecto de la CANACAR se divide en cuatro grupos, el primero aborda las acciones de coordinación que como Cámara realizarán en conjunto con el Gobierno Federal, a quien realizaron un llamado para promover la instalación de un Comité Interinstitucional que garantice el abasto y atienda la emergencia sanitaria, donde esperan la participación de personal de la SCT, SSPC, SE y SCHP, así como representantes de los gobiernos estatales, empresas de la iniciativa privada, y cámaras, asociaciones y prestadores del servicio de autotransporte federal.
En el segundo grupo de acción del proyecto se establecen las acciones sanitarias a cumplir, mediante el establecimiento de protocolos a implementar al interior de las empresas del sector, y acciones que garanticen la sanidad durante toda la cadena de suministro, es decir, de origen a destino, priorizando el cuidado durante el viaje. Mientras que, en el tercer grupo de acción se abordan las medidas de seguridad, donde al ser conscientes de la importancia que tiene el autotransporte en este tipo de momentos de crisis, es fundamental, promover la instalación de centros de reacción inmediata para atender posibles robos en los corredores de mayor incidencia.
Finalmente, en el cuarto grupo de acción, la CANACAR ya analiza las posibilidades de que se logren apoyos financieros y fiscales, con la finalidad de evitar afectaciones directas a las empresas prestadoras de servicio durante la pandemia.